La crisis de Huawei sigue centrando todas las miradas del mercado tecnológico. Los millones de usuarios de la marca asiática pueden respirar tranquilos, de momento, después de que Estados Unidos haya decidido marcar un plazo de tres meses antes de comenzar a imponer sanciones. Además, el Departamento de Comercio colabora reduciendo algunas restricciones impuestas la semana pasada.
Se mantiene la prohibición al gigante asiático de comprar piezas y componentes americanos para fabricar nuevos productos, sin contar con la aprobación de licencias.
Por su parte, Huawei ha querido tranquilizar a sus clientes asegurando en redes sociales que seguirá proporcionando actualizaciones de seguridad y servicios de postventa a todos lo Smartphones, tabletas y dispositivos vendidos y, también, a los que sigan en stocks en las tiendas. “Seguimos construyendo un ecosistema de sofware seguro y sostenible, para seguir ofreciendo la mejor experiencia a todos los usuarios del mundo”, han publicado.
Además, el fundador de la compañía, Ren Zhengfei ha advertido a Trump que están subestimando la fuerza de Huawei.