El impago a proveedores por parte del Govern está creando una situación límite en muchos sectores de la economía balear. Mientrasla Administración no hace frente a las deudas, las empresas se ahogan, quiebran y cierran o intentan sobrevivir despidiendo trabajadores, cosa que no harían si les pagasen lo que les adeudan.
¿Cuántas han cerrado por culpa del Ejecutivo autonómico? ¿Cuántos empleados se han ido a la calle porque no se pagan las cantidades adeudadas? Muchas, especialmente pequeñas y medianas empresas, que han visto de la noche a la mañana como su negocio se iba a pique porque no podían hacer frente a los pagos ni continuar con su actividad por falta de liquidez. Y suma y sigue, por lo que ya no vale hablar de situación heredada sino tomar decisiones, porque esto es lo que hay y no lo vamos a cambiar.
Es hora de empezar a pagar, de impedir que se hundan más empresas, de hacer frente a las deudas y dejarse de declaraciones de cara a la galería. Es hora se coger el toro por los cuernos y empezar a solucionar una situación a la que nos han llevado ellos, porque ¿qué pasaría si todos los ciudadanos dejamos de pagar impuestos, hipotecas, facturas de la luz, del agua…?