Según ha explicado la Conselleria de Medio Ambiente y Territorio en un comunicado, este es el resultado del protocolo general de actuación sobre inspección y vigilancia de los espacios naturales protegidos y de los lugares de la Red Natura 2000 firmado entre ambas entidades el 14 enero de 2019 y que tiene todavía dos años más de vigencia.
La colaboración entre el Consell de Mallorca y la Conselleria de Medio Ambiente en materia de detección de posibles construcciones ilegales dentro de suelo rústico protegido es anterior a la firma de este protocolo.
Sin embargo, el documento ha agilizado las acciones de inspección y vigilancia, el intercambio de información entre instituciones y la organización de grupos de trabajo conjuntos.
El conseller del área, Miquel Mir, ha destacado que el protocolo ha supuesto "un paso de gigante" en materia de protección del territorio y disciplina urbanística.
Igualmente, ha señalado sería interesante estudiar su aplicación en el resto de islas, una vez se ha constatado el efecto positivo que ha tenido en Mallorca.