El gasto turístico no deja de crecer en Baleares. Sólo en octubre, el archipiélago recibió más de 1,5 millones de turistas internacionales, lo que supone una reducción del -1,72 por ciento respecto al mismo mes del año anterior, con un gasto de algo más de 2.000 millones de euros, un 1,6 por ciento menos.
A pesar de la caída, se trata del segundo mejor dato de llegadas de turistas internacionales y el segundo mejor en cuanto a gasto en un mes de octubre en la región de la serie histórica..
De media, cada turista que visitó la comunidad gastó al día 195 euros en octubre, un 3,64% más que el mismo mes del año anterior, y permaneció 6,83 día en Baleares. En total, el gasto medio por persona se situó en 1.330 euros, un 0,18% más que en octubre del año anterior.
Por comunidades, la región más visitada fue Cataluña con el 21,41% del total de turistas internacionales que viajaron al país, seguida de Baleares (17%) y Andalucía (15,39%).
PILAR ESENCIAL DE LA ECONOMÍA
Los datos demuestran que el turismo internacional sigue siendo un pilar esencial del modelo económico de las Baleares. Las cifras muestran que, incluso con subidas moderadas en llegadas, el gasto crece con fuerza; y ese flujo alimenta empleo, comercio y actividad en sectores adyacentes.
Los expertos subrayan, sin embargo, la importancia de diversificar los mercados emisores para garantizar la resiliencia del sector, frente al riesgo de depender excesivamente de pocos países, ya que no todos los mercados mantienen su empuje. Es el caso del turismo procedente de Alemania —históricamente muy relevante para las islas— que por primera vez en una década registró una caída sostenida durante la temporada alta de 2025 (de junio a septiembre), por primera vez en una década.
Esta tendencia apunta a una saturación del mercado tradicional germano, combinado con encarecimiento de alojamientos, inflación, competencia de otros destinos mediterráneos, y —según algunos analistas— un cambio de perfil de este turista hacia mercados distintos u otro tipo de turismo.
COMERCIO Y EMPLEO
Las cifras, en todo caso, sugieren que el turismo sigue generando un impacto estructural no sólo en hostelería o alojamiento, sino también en comercio, servicios, empleo y actividad económica general.
En el caso del comercio —uno de los sectores clave beneficiados por el gasto turístico— se ha observado una subida significativa. Hasta septiembre pasado, las ventas en Baleares crecieron un 4,6 por ciento interanual, superando la media nacional; un crecimiento que se atribuye en gran medida al gasto de visitantes extranjeros. Además, el empleo en el sector comercial creció otro 3 por ciento respecto al año anterior, alcanzando los 54.000 trabajadores, un dato récord para octubre.








