“Una cosa es encajar un gol en el primer minuto, porque son cosas que pasan, pero no puedes encajar dos goles antes del minuto cuatro”, ha dicho Michael Laudrup al finalizar el partido entre el Mallorca y el Almería, en el que los bermellones perdieron por 3-4. Todos los goles del equipo visitante fueron hechos durante el primer tiempo y, pese al esfuerzo de los jugadores rojillos durante el segundo tiempo, el equipo bermellón se quedó fuera de la Copa del Rey. Pese a su evidente malestar, Laudrup se negó a buscar culpables: “Aquí no es cuestión de apuntar el dedo a los jugadores porque ha sido el conjunto en sí; es evidente que se dieron cuenta por la reacción que tuvieron en la segunda parte, pero eso a mí no me sirve para mucho”. En este sentido, ha dicho que “lo único positivo es que el domingo nos vamos a enfrentar al mismo equipo, así que antes tendré que dar una de las charlas más cortas de mi carrera, sólo para dar la formación, porque si no hay motivación para el domingo, no entiendo nada…”. Preguntado por los periodistas sobre Cavenaghi, autor de dos goles del Mallorca, el técnico danés ha sido categórico al responder con un “hoy no es día de elogios, no voy a hablar de nadie en concreto”. Y sobre las conclusiones que ha sacado sobre el encuentro ante el Almería, se limitó a responder: “Las conclusiones hay que hacerlas sentado y con la cabeza fría, así que seguro que no será hoy”. Respecto a por qué usó la misma defensa que ante el Hércules, Laudrup subrayó: “Si algunos jugadores no juegan nunca, ¿cómo sabremos que son buenos? No hay muchos millones para cambiar jugadores, y la verdad es que yo no tengo problemas en admitir que me equivoco cuando me equivoco”. Por último: ¿esperaba Laudrup algún milagro en el segundo tiempo? “¿Marcar seis goles? Es un poco difícil”, dijo el entrenador antes de acabar su rueda de prensa.
