De la excelente entrevista que Laura Marqués le ha hecho a Maheta Molango en www.mallorcadiario.com, se extrae la conclusión de que este hombre pasa del norte al sur como de la noche a la mañana. Una prueba escrita y palpable de las manos en las que está el Mallorca, las de Robert Sarver, de quien el CEO asegura que los mallorquinistas no saben la suerte que tienen de haber conseguido a este dueño. Lo dice quien desde que llegó contratado percibe un salario de lujo y puesto ejecutivo y de representación en el que le mantienen pese a reconocer, así de pasada, el fracaso del descenso. ¡Cualquiera no iba a encomiar, no sé si adular, al “pagano”!. Así tampoco extraña lo más mínimo que el aludido sostenga que “no por ser de aquí se quiere más al Mallorca”, como si su amor por el club no tuviera que ver con su salario y el de sus jefes con el negocio, fallido hasta la fecha. De amores como los de los americanos en cuestión o de Claassen y compañía, líbranos señor.
No se puede esperar más de quien en su día esgrimió que “si solo dependes del resultado del domingo, tienes un problema” y ahora trata de presumir en su ciega convicción de que “es mejor estar en una división de la que tu eres líder” porque al público lo que le va es que ganes partidos. ¡Vamos!, que el Mallorca podría bajar a Tercera y no le gana ni el “tato”. Eso si, por el camino y para disimular, pasamos de comparar deportivamente el club con los mejores equipos españoles y europeos a equipararle con el Hércules y el Elche, sea dicho con el mayor de los respetos a ambos equipos alicantinos. Por si pastel le faltara alguna guinda, Molango insiste en que “este año tenemos mejor equipo” aun sin añadir que milita donde lo hace, en Segunda B. Yo también soy el mejor columnista deportivo del presente digital. No hay otro.
Permítanme que les invite a leer o repasar el trabajo de mi compañera. No tiene desperdicio.