Estaba en parada respiratoria pero la rápida y eficiente acción de los socorristas han impedido la tragedia.
Un grupo de socorristas de Cala Major que se encontraban entrenando, han estabilizado este martes a una bebé de ocho meses que convulsionaba. Según informan desde Emergencies Setmil, la pequeña estaba con su madre y los efectivos no lo dudaron y comenzaron con las insuflaciones y el oxígeno.
Finalmente, el bebé recuperó la conciencia. Su padre, en cambio, tras el susto se desmayó. Ambos han sido tratados por sanitarios y están estables.






