Miles de mallorquines ven peligrar su viaje a Ciutadella con motivo de las fiestas de Sant Joan. La nueva ley turística balear ha sacado del mercado numerosas viviendas que habitualmente se alquilaban durante las fiestas. Se calcula que solo 130 casas de la zona de Ciutadella cuentan con el permiso de alquiler turístico, cantidad insuficiente para atender la demanda de los mallorquines.
A fecha de hoy, la mayoría de hoteles han agotado las reservas y es imposible encontrar una habitación para Sant Joan. Las inmobiliarias y las agencias de viaje pronostican una “pérdida importante” que se notará en el sector, tanto para particulares como para oferta complementaria.
La Ley de alquiler Turístico aprobada por el Govern obliga a alquilar por un plazo no inferior a un mes y estipula que las casas no pueden ofertarse a través de plataformas digitales.
Se calcula que en las fiestas de Sant Joan de 2017 la ciudad recibió unos 30.000 turistas, catalanes y mallorquines en su mayoría.
