Anda enervado el presidente de la Asociación de Comercios turísticos (ACOTUR) de Mallorca, Pepe Tirado. En las explosivas declaraciones concedidas a este digital ayer sábado, denunciaba que trato de favor "descarado" que el alcalde de Calvià, Alfonso Rodríguez, dispensa al sector hotelero del municipio, representado por Sebastià Darder, hombre de Melià en la zona y presidente de los hoteleros de Palmanova y Magaluf.
No hay delito. Es más, Rodríguez ha sido inteligente yendo de la mano del sector económico más potente del municipio. Un sector que lleva invertido mucho dinero en mejorar su oferta calvianera. él gana más dinero y trae gente con más poder adquisitivo.
A quien escribe estas líneas le consta que Rodríguez ha recibido algún que otro tirón de orejas de su partido (el PSIB) y del Govern reprochándole tanto compadreo con los hoteleros. A pesar de ello, la estrategia sigue siendo un acierto.
Ahora bien, toca no discriminar a nadie. Si el alcalde puede coger con su mano dercha a los hoteleros, puede llevar con la izquierda a comerciantes y restauradores de la zona. Puede apretar ambas manos con la misma intensidad. Rodríguez, Darder y Tirado suman mucho juntos, aunque dos de los tres no se "tragan".
Acaba la temporada y hay tiempo por delante para tejer las próximas estrategias. Habrá tiempo, despachos, mesas y manteles para aunar discursos y buscar beneficios para todos.
Rodríguez volverá a hacerse muchas fotos con los hoteleros, por poco que gusten en el Consolat.





