Que el Gobierno de España quiere cargarse el sistema educativo es una afirmación irrefutable con la que ni el Presidente del Gobierno podria estar en desacuerdo.
La semana pasada, en este espacio, ya analicé lo que al día siguiente, es decir, el sábado, se confirmó en el Boletín Oficial del Estado. Y no es que yo tenga una bola màgica que me lea el futuro. Ni mucho menos. A buen seguro, en los corrillos de muchos centros educativos de este país durante esta semana, el tema de conversación entre los docentes ha sido la valoración de la decisión del gobierno de eliminar el requisito del Máster de Formación del profesorado y la supresión del número de suspensos para titular. Ciertamente, no han sido unas medidas muy bien acogida en el sector educativo. Esto demuestra una vez más que el camino de este gobierno no es el correcto.
Otro de los motivos por los que sostengo que la intención de este gobierno es destruir el sistema educativo es la modificación del articulo 109 de la Ley Orgánica de Educación. En este articulo reside la clave para entender que otro de esos objetivos de destrucción enfoca a la escuela concertada. Y es más. La nueva redacción que se le da a este articulo viene a demostrar que el sistema educativo está politizado. Y de esta manera, nunca avanzaremos hacia una consolidación del sistema sino que estas medidas únicamente favorecen a la erosión del sistema.
Al margen del contenido de este articulo, es asombroso ver cómo los partidos que conforman el pacto de gobierno han enmendado el texto que nace del propio gobierno. No me digan que cuanto menos es extraño. Una lectura ràpida y sencilla es que los textos normativos no son consensuados ni por los partidos que forman el gobierno antes de presentarlos.
¿Cómo queremos que algo funcione si los que proponen cambios y tienen que liderarlos no se ponen de acuerdo? Estos días he dedicado a leer algunas de las enmiendas presentadas por Podemos y me ha dejado los pelos de punta. Proponen la eliminación total del derecho de elección de educación. ¿Qué tiene que decir el Presidente del Gobierno al respecto?
Creo que este modelo no está pensado en mejorar el sistema educativo sino más bien utilizar el sistema educativo para cambiar el sistema social de nuestro país. Y en este sentido, creo que todos los que conformamos el sistema educativo deberíamos oponernos.