¿Se puede empeorar lo que nos sucede en España? ¿Podríamos estar más hundidos? No conteste todavía, no me diga lo que todos pensamos. Eche una mirada a lo que tenemos alrededor. Mire hacia el Este. Italia. Ahora, admita conmigo que sí, que además de tener una gestión infecta, además de tener corrupción por doquier, encima se puede tener a Berlusconi. Nuestro Presidente Zapatero sueña con tumbarse en una hamaca para supervisar las nubes, pero Berlusconi no tiene posibilidades de ser superado porque sus sueños son irreproducibles incluso en una sala X. Sus comentarios sobre el culo de Angela Merkel son tan impresentables, tan inadmisibles, tan de estercolero, que en un país mínimamente serio le obligarían a presentar la dimisión inmediata. Ustedes verán: Europa lleva más de una década en la que se está deslizando por una senda degradatoria de su política, que probablemente en el caso de Berlusconi haya llegado a su punto culminante. Es el Everest del esperpento, una vergüenza para cualquiera que se sienta europeo. Un horror para el ser humano.
