El nuevo equipo de gobierno de Cort arrancó la legislatura declarando la guerra a las terrazas del passeig d'es Born. Tras la oposición frontal del sector de restauración y del ámbito turístico, la responsable de la decisión, Aurora Jhardi, decidió sentarse a hablar con las partes interesadas. Se anunció una decisión para el mes de septiembre, y las terrazas siguen ahí.
¿En Navidad, el paisaje del Born será el mismo que hay ahora o el espacio que ahora ocupan las terrazas tendrá otro aspecto?
Nuestra concejalía y el alcalde ya nos hemos entrevistado tanto con el presidente de Restauración como con la presidenta de la Federación de comerciantes de la zona. Además, yo me he reunido con la Associació de Veïns de Sant Nicolau. En esta primera toma de contacto nos han expuesto sus miedos y nosotros nos hemos comprometido a elaborar diferentes propuestas alternativas. No puedo poner todavía una fecha porque eso dependerá de si las propuestas que nosotros presentamos gustan, si nos piden que hagamos modificaciones a las mismas, si esas modificaciones se pueden hacer rápido, etc. Está claro, que a nosotros nos gustaría cerrar el tema lo antes posible para acabar con esta incertidumbre que puede provocar ciertos nervios entre los restauradores, trabajadores y ciudadanos. Tenemos premura para zanjar el tema.
¿Las terrazas van a desaparecer del Born?
Estamos trabajando para encontrar la solución más equilibrada y satisfactoria entre todos. Estoy convencida de que es totalmente posible llegar a este punto y que todo el mundo vea que sus intereses están cubiertos.
¿Cuáles son estas propuestas?
Tenemos unas cuantas, pero todavía no queremos darlo a conocer a los medios de comunicación porque creo que es un acto de responsabilidad que primero se lo comunique a las partes implicadas. No son propuestas cerradas, se las queremos presentar para que ellos nos digan cuál les gusta más y cuál menos.
¿Estas ideas van más allá de quitarlas, dejarlas o moverlas a la izquierda o a la derecha? ¿Hay alguna propuesta que vaya más lejos de estos cuatro escenarios?
No. Si es que sí tenemos que ver cómo lo hacemos y si es que no también hay que ver cómo lo hacemos.
Ha habido algunos colectivos que al conocer la propuesta de cambiar la ubicación de las mesas y pasarlas a un lateral, planteaban posibles problemas de seguridad a la hora de realizar tareas de extinción de incendios. ¿Las propuestas contemplan esos aspectos?
Todo eso está previsto. Estamos trabajando conjuntamente con las concejalías de Mobilitat y Model de Ciutat, que es donde tenemos a los arquitectos.
¿Por qué cree que se ha desatado tanta alarma social y incertidumbre respecto a la continuidad o cierre de las terrazas?
La incertidumbre ha nacido que por el camino nos hemos olvidado de que la instalación de terrazas en el Born era un proyecto experimental que inició el anterior gobierno municipal y que tenía que acabar el 2016. Si nadie lo hubiera olvidado, estas incertidumbres no se hubiesen producido.
¿Y lo que vendrá ya no será experimental?
No, esperemos que no. Queremos consensuar la solución y no tomarla unilateralmente porque queremos que sea definitiva y duradera.
¿Puede plantearse el escenario de que las terrazas se retiren en invierno y se permitan en verano?
Yo no descarto nada, pero insisto en que no es una decisión que se vaya a tomar unilaterlamente sino consensuada por una cuestión de responsabilidad política. Estamos sometidos a nuestro programa electoral, pero tenemos que intentar siempre, o al menos al principio, consensuar las cosas, hacer propuestas en común y trabajar juntos.
En lo que se refiere al resto de terrazas que no están en el Born, ¿qué actuación está prevista?¿Se modificará la ordenanza de la ocupación de la vía pública?
No es una prioridad para nosotros el cambio de la ordenanza pero tampoco lo descartamos. De momento nos ceñiremos a hacer cumplir estrictamente la ordenanza porque es lo que nos reclaman los vecinos. Queremos que los ciudadanos no se sientan invadidos por las terrazas y que a su vez las terrazas no se sientan desprestigiadas o culpabilizadas por parte de la sociedad. Como digo, esta es la demanda común de los vecinos: el cumplimiento de la ordenanza vigente. Pero si el años que viene modificaremos la ordenanza o no, no lo sé. Tendremos que estudiarlo muy bien para ver si con el cumplimiento de la normativa actual llegamos a donde tenemos que llegar.
¿Tampoco se modificarán los horarios?
De momento no. Como todos sabemos, hay muchas quejas de los vecinos de la calle Fábrica. En este conflicto también habría que hacer reuniones conjuntas entre vecinos y restauradores de la calle.
