Tras la dimisión del vicepresidente del Govern, Biel Barceló, toca buscar un sustituto que ocupe su puesto y que conforme lo acordado en los ‘Acords pel canvi’, corresponde a Més per Mallorca decidir quién debe ser. Sin embargo, el PSIB pretende rentabilizar la situación y pone pegas a que la diputada Bel Busquets sea quien ocupe el puesto de Barceló al frente de la conselleria de Innovación, Investigación y Turismo. Pero no se puede ganar siempre, porque cuando Ruth Mateu se vio obligada a abandonar su cargo de consellera por el asunto de los contratos a Jaume Garau, ya logró pasar parte de las competencias que aquella gestionaba a Presidencia, controlada por la socialista Pilar Costa.
Este episodio recuerda al de la designación de Balti Picornell como presidente del Parlament. El PSIB también se opuso entonces, pero tuvo que plegarse a la voluntad de Podem ante la amenaza seria de ruptura del pacto. Recordemos que el PSIB propuso que Vicenç Thomàs sustituyese a Xelo Huertas, cosa que finalmente no sucedió. Ahora Més per Mallorca deberá mostrarse firme para ser ellos quienes decidan al sustituto de Barceló, y no el PSIB.
En todo caso, Bel Busquets no parece la persona idónea para ocupar un cargo tan relevante y haría bien Més en reflexionar sobre ello y buscar otro candidato que no despierte tantas suspicacias entre las filas socialistas y sobre todo, entre el sector turístico.
