La última moda en Internet consiste en hacerse retratos, los “selfie” que tanto abundan a día de hoy, en lugares pequeños e imposibles. Los culpables de esta nueva tendencia son la actriz Christina Ricci y la foto que hace poco publicó en su cuenta de Twitter intentándose meter en una lavadora.
Hoy en día, cuando las redes sociales han establecido que todo lo que está de moda va precedido de una almohadilla, el nombre elegido para este tendencia es, en honor a su creadora, #riccing. Basta con introducir este “hashtag” (etiqueta) en Twitter o Instagram para encontrar millones de fotografías de personas metidas en bolsas, cajas, armarios y todo tipo de rincones.
La moda de los “memes”
A primera vista, una persona metida en una nevera, el vestido de Jennifer Lawrence en la última gala de los Globos de Oro o una niña corriendo con un pompero no tienen nada en común. Sin embargo, nada más lejos de la realidad, ya que todos ellos son “memes”, imágenes divertidas y repetidas hasta la saciedad en las redes sociales.
El término lo inventó el biólogo Richard Dawkins en su libro “El gen egoísta”, publicado en 1976, para definir todas las frases, conductas o melodías populares que existían en cada cultura y que se propagan a través de la imitación. Ahora, la expresión se utiliza también para este fenómeno de Internet.
La creadora de este nuevo “meme”, para avivar esta moda digital, ha seguido publicando imágenes en su Twitter, y en su cuenta ya se pueden ver imágenes suyas metida en una lavadora o dentro de un fregadero. “Ser pequeña tiene sus ventajas”, ha admitido Ricci en esta red social.
“Hacerse fotos así es una experiencia divertida que potencia la creatividad”, comenta una seguidora de esta y otras tendencias por el estilo. “Nunca sabes con que nueva foto loca te van a sorprender tus amigos”, explica.
La importancia de este “meme” está creciendo día a día gracias a las aportaciones de muchos usuarios de redes sociales y a la facilidad para copiar la tendencia. Sólo hay que encontrar un lugar pequeño, y con esfuerzo, paciencia, altas dosis de humor y poca vergüenza, introducirse dentro y pedir a un amigo que te fotografíe.
Isabel Gallego/ EFE