El empresario Bartolomé Cursach y el directivo de su grupo Bartomeu Sbert han pasado su primera noche en la prisión provincial de Palma de Mallorca, tras la decisión del titular del Juzgado de Instrucción número 12 de Palma de ordenar prisión provisional y sin fianza para ambos este viernes. Ambos están acusados de 16 delitos, entre ellos el de homicidio. El tercer detenido en la operación inciada el pasado martes, el también directivo del grupo Antoni Bergas, quedó en libertad provisional con cargos y la obligaciòn de comparecer todos los lunes, retirada de pasaporte y prohibición de acercarse a determinados edificios municipales de Palma y Calvià, dondd prosiguen las investigaciones.
Según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Baleares (TSJIB), a los encausados se les imputan presuntamente los siguientes delitos: cohecho, extorsión, amenazas, coacciones, uso de información privilegiada, pertenecencia a organización criminal, delito contra la hacienda pública, blanqueo de capitales, tráfico de influencias, homicidio, corrupción de menores, delito contra el derecho de los trabajadores, falsedad documental, estafa procesal, aportación de documentos falsos en juicio, y tenencia ilícita de armas.
Las investigaciones, que se encuentran bajo la decisión judicial de secreto de sumario, se centran ahora en las posibles ramificaciones del caso de presunta corrupción en la Policía Local, centrada en la presunta trama de corrupción urdida dentro del cuerpor policial en forma de extorsiones a empresarios y realización de favores. No se descartan nuevas detenciones.