Según ha informado Guardia Civil, investigadores del Instituto Armado venían sospechando del uso de un chalet en urbanización Sa Torre --término municipal de Llucmajor--, como punto de cultivo 'indoor', donde posteriormente se trataba la sustancia estupefaciente.
Tras obtener la correspondiente orden judicial para entrada y registro del domicilio, los guardias civiles descubrieron que el sótano de la vivienda estaba dedicado al cultivo y procesado de marihuana. El interior estaba estructurado según las diferentes fases de crecimiento, maduración y secado de las plantas.
Los guardias civiles intervinieron 360 plantas y 3,5 kilos de cogollos secos.
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