Un año más volvemos a encontrarnos en la puerta del Sol, comiendo las famosas uvas, en mi casa sin pepitas para no atragantarnos.
Sin darnos cuenta, ha pasado otro año más, entre quejas, malas vibraciones, profecías cumplidas y otras no, el tiempo va pasando.
Y he aquí que ese tiempo es el que nosotros, a veces no sabemos disfrutar. Nos centramos en lo malo que ha de venir, en lo que debería de ser mejor y en eso se nos va la vida.
Una vida llena de miedos, ataduras, renuncias y escasez, cuando podría ser todo lo contrario.
¡Dios no quería que fuera tan difícil!, nosotros lo hemos hecho complicado.
La vida debería de ser más sencilla y de hecho lo es, es mucho más fácil de lo que nosotros lo hacemos, nos complicamos la vida con las críticas, con nuestros miedos y con la queja de un mundo que debería de ser mejor.
Ese mundo es posible, simplemente tenemos que cambiar la forma de pensar y ser conscientes de que estamos en un momento de cambio constante y que el mundo como lo conocimos ya no existe.
Estamos creando las bases de un nuevo mundo y este año lo veremos más y más. Una nueva realidad económica, política y social se va dibujando en nuestro día a día y depende de todos nosotros como queramos que sea esta nueva realidad.
Si formamos grupos homogéneos con nuestra forma de ver el mundo, con personas que piensen como nosotros y tengan la misma vibración será mucho más sencillo.
Al nuevo año le pido mucha salud y fuerza para poder sostenerme emocionalmente y poder ayudar a los que tengo a mi alrededor.
Le pido sensatez y manejo de mi ego, para poder tolerar situaciones que en ocasiones me parecen intolerables.
También le pido fuerza para poder cuidar de los míos y de mi misma y hacer feliz a todos los que están a mi alrededor y por descontado, ser muy feliz yo.
Y por supuesto pido energía para mejorar mi entorno en lo que depende de mí, ya que con el resto no podré hacer nada de nada.
Si todos nos esforzamos en hacer de nuestro pequeño universo un lugar mejor, es posible que 2023 sea un buen año y que podamos reinos más y llorar menos.
Si nos ayudamos a ser mejores personas, es casi seguro que creemos un mundo mejor y le pido a este año que comienza, humildad, salud, fuerza y mucho AMOR para poder realizar todas las funciones que me tocan realizar en esta sociedad.
De mi depende mi granito de arena y así será para cada uno de nosotros.
Si tú mejoras tu entorno y te mejoras a ti mismo, el mundo cambia y todo contigo.
Desde aquí te deseo un fantástico 2023 y un Año Nuevo lleno de Amor, Alegría y Felicidad.





