Feyisa Lilesa, el atleta etíope que ha ganado la medalla de plata en la prueba masculina de maratón en los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, ha pedido asilo en Brasil porque teme volver a su país tras expresar públicamente su rechazo al actual Gobierno.
Lilesa aprovechó su momento de gloria en la línea de meta para dar a conocer la situación de su pueblo natal: los oromo. Alzó los brazos y formó una cruz con ellos, un gesto asociado a las protestas contra el Gobierno etíope.
"La situación del pueblo oromo en Etiopía es muy peligrosa", explicó a la prensa. "En nueve meses más de 1.000 personas han muerto en las protestas" para impedir que el Gobierno les prive de sus tierras en torno a la capital, denunció. Lilesa, de 26 años, teme por su vida, por lo que ha decidido permanecer en Brasil hasta aclarar su situación legal.
"Me matarán. No tengo otro visado, así que me quedaré aquí y, si consigo otro visado, iré a Estados Unidos", ha anunciado este lunes, según informa 'The Guardian'.
Una iniciativa en las redes sociales para ayudar a Lilesa a emprender una nueva vida fuera de Etiopía ha recaudado 40.000 dólares en apenas unas horas. Aunque está prohibido hacer manifestaciones políticas durante los Juegos Olímpicos, no parece que vaya a ser sancionado.