El recibo de la luz del usuario medio subió un 3,5 por ciento en septiembre, el sexto incremento mensual consecutivo que convierte a la factura eléctrica en la tercera más cara de la historia, según los datos de Facua.
En concreto, 83,55 euros es lo que ha pagado un usuario medio (366 kWh de consumo y 4,4 kW de potencia) con las tarifas semirreguladas PVPC de todo el mes de septiembre. El encarecimiento interanual alcanza ya el 15,9 por ciento, de modo que el recibo ha subido 11,47 euros con respecto a septiembre de 2017, cuando se situó en de 72,08 euros.
En cuanto al precio de la energía consumida, en los 30 días de septiembre el kWh se ha situado en una media de 17,58 céntimos (13,83 más impuestos), un 21,7 por ciento por encima de los 14,45 céntimos (11,36 más impuestos) de septiembre del año pasado.
La factura del usuario medio se situó el pasado agosto en 80,73 euros tras subir un 3,0 por ciento. En julio, el recibo fue de 78,39 euros (+2,2%), en junio se situó en 76,71 euros (+1,8%), en mayo en 75,34 euros (+7,7%), en abril en 69,94 euros (+0,7%), en marzo en 69,46 euros (-9,0%), en febrero en 76,32 euros (+2,0%) y en enero en 74,81 euros (-6,1%).
Los análisis de Facua ponen de manifiesto que la factura de la luz más cara a nivel histórico fue la del primer trimestre de 2012, cuando se situó en 88,66 euros para el usuario medio (tras la corrección de la tarifa fijada por el Gobierno por una sentencia del Tribunal Supremo).
Tras ella, los 87,81 euros de enero de 2017 y los 83,55 euros del pasado mes de septiembre. La cuarta factura más elevada fue de 81,18 euros, correspondiente a la tarifa de julio de 2015 y la quinta 80,73 euros, de agosto de este año.