No hay dinero para el tren. El Mundo ha informado estos días que los proyectos ferroviarios están paralizados a falta de que lleguen 100 millones del convenio firmado por Madrid. Como no hay dinero, las empresas paralizan las obras, lo que es de puro sentido común. Si hacemos un repaso de las actuaciones en transporte público de esta legislatura podemos llegar a la conclusión de que no se ha hecho ni un metro más Íferroviaria. Del tranvía de la Bahía de Palma no hay noticias, se descartó el tren hasta Alcúdia por falta de valentía política, y aquello que nos vendían sobre inversiones ferroviarias ha resultado ser puro humo. Nada de nada, y los trenes eléctricos deben estar guardados en cualquier almacén después de que una docena de políticos se fotografiasen con ellos. No hablaré del tren hasta Manacor, que estuvo paralizado medio año por la incompetencia de los servicios de mantenimiento y por una obra mal hecha en la primera etapa del Pacte.
