Aquella polémica e histórica prórroga entre Mallorca y Elche en el Sitjar

Las cosas no empezaron bien para los isleños, quienes tan solo contaron con el apoyo de 4.000 aficionados en las gradas. Y es que en el minuto 19, Álvaro tuvo que ser retirado al sufrir una rotura de ligamentos en su tobillo izquierdo. Una lesión que le hizo pasar por el quirófano y estar varios meses alejados de los terrenos de juego. Precisamente de su sustituto Vidal nació el pase que originó el primer tanto de la noche, obra del exilicitano Claudio en el minuto 33.

Tras el descanso, empezó la locura. En el 55, el colegiado catalán Vico Díaz mostró al visitante Guina su segunda amarilla y en el 70, expulsó con roja directa Miguel.

Tan solo dos minutos después de quedarse el Elche con nueve, el RCD Mallorca empataba la eliminatoria con un afortunado tanto de chilena de Claudio que rebotó en Robi antes de besar las mallas. Luego, con el tiempo cumplido, los alicantinos forzaron la prórroga gracias a un chut del inicialmente suplente Gomis que tocó en un defensa para sorprender a Zaki. 

Tras una primera parte del tiempo suplementario en la que los visitantes resistieron las acometidas barralets, el árbitro volvió a aparecer en el primer minuto del segundo acto para dejar a los de la franja con ocho al expulsar al ex mallorquinista Chema también por doble amonestación.

Luego, cuando restaban tan solo cinco minutos para llegar a los penaltis, castigó como pena máxima una acción sobre un Nadal que pudo haber cometido una falta previa. Vulic aprovechó el 'regalo' para sellar la clasificación mallorquinista.

POR CUARTA VEZ EN CUARTOS

Por cuarta vez en la historia, los de rojo y negro estaban en antepenúltima ronda copera. Una fase que, entonces, parecía insuperable. Eso sí, primero tocaba lograr la permanencia. Y es que en aquella temporada, los cuartos, las semifinales y la final de la Copa del Rey -que los de Serra Ferrer perderían ante el Atlético de Madrid en el Bernabéu- se iban a disputar una vez finalizado el campeonato liguero.

Como anécdota, destacar que la mayoría de los aficionados acabaron coreando al Elche y abucheando a su equipo a pesar del triunfo. Y es que de no haber sido por las tres expulsiones, seguramente el conjunto entrenado por el Gustavo Silva habría plantado todavía mayor cara.