El Juzgado de Instrucción nº 1 de Palma ha dictado auto por el que transforma las diligencias previas en procedimiento abreviado contra Pilar Bonet, ex consellera insular de Hacienda del Consell de Mallorca, por un presunto desfalco de 2,177.200,80 € al grupo turístico Globalia, al que pertenecía Air Europa.
El magistrado, Juan Manuel Sobrino, ha calificado los hechos como estafa continuada y falsedad documental cometidas durante el periodo en que Bonet ejercía como responsable del departamento de Contabilidad y Control de Globalia. Este auto implica que la acusada será formalmente juzgada, salvo que se alcance un pacto de conformidad.
Bonet había confesado voluntariamente ante el juez en marzo de 2025, reconociendo la mayoría de los hechos, salvo ciertos conceptos económicos, y exonerando a su hija al argumentar que en ese momento era menor de edad.
Se prevé que tanto la Fiscalía como la acusación particular formalicen sus escritos de acusación y la defensa presentará su estrategia. Actualmente están en curso negociaciones entre partes para alcanzar un acuerdo que evitaría el juicio oral ante la Audiencia de Palma.
ADICCIÓN
En paralelo, Bonet admite sufrir un trastorno adictivo a las compras compulsivas, por el que recibe tratamiento psiquiátrico y acude a Projecte Home. Su defensa sostiene que este problema fue el origen del desfalco y que la expolítica entregó una lista con nombres de personas a quienes regaló artículos de lujo —bolsos, ropa, viajes— muchos sin abrir o incluso sin saber su procedencia.
Globalia, por su parte, atribuye el fraude a una operativa de doble facturación y desvío de fondos a múltiples cuentas, incluidas cuentas de la hija de Bonet y de una familiar que fue despedida tras confirmarse su implicación.
La acusada solicitó una excedencia en verano de 2023 para asumir el cargo en el Consell de Mallorca, y apenas unas horas después de que trascendieran las sospechas, fue cesada del puesto y su marcha fue presentada públicamente como una dimisión por motivos personales.
