En estos días tan familiares he estado rodeada de adolescentes que te dan sin quererlo clases y lecciones de la vida a veces errónea que llevas. Al parecer las nuevas inquietudes jóvenes no son las de otros tiempos, más organizadas y encaminadas por los adultos y tutores de la época.
Los jóvenes de hoy en día te cuestionan y negocian su vida poniéndote en bretes con la mas pura filosofía de Sócrates o Platón, con ejemplos y estudios claros de su visión de futuro y los porqués más inusuales, que mentes a lo mejor un poco tradicionales como la mía, te hacen tambalear y cuestionar el porque de todo lo aprendido.
Hablaba con ellos y me retaban a explicar el porque de los estudios que como toda madre les induce a estudiar, el porque de las tareas que realizan como máquinas, el porque de estudiar materias tan rectas y no el desvío a materias más creativas, esa palabra "desvió" no les gusto nada y estuvimos más de una hora negociando porque le llamaba desvió y no estudio... ¿Porque las artes y la cultura no son consideradas profesiones tan importantes como la de médico o ingeniero?, comentábamos.
La verdad es que cada ser humano viene al mundo con un don, o eso pienso yo, y cada cual debe encontrar su camino pero como me inducían a pensar los adolescentes nosotros los adultos hemos creado clichés que los encaminen a ser, a estudiar y a pensar como nosotros queremos y no como ellos quieren.
Llegamos a un punto común en el que estoy totalmente de acuerdo que la creatividad debería ser una de las materias escolares con las mismas horas de curso que las matemáticas, pero ¿como cambiar estos registros casi centenarios que llevamos haciendo durante tantos años?
La respuesta está en ellos, ellos son el futuro y el nuevo cambio, espero que sean valientes, que tengan la capacidad de pensar por ellos mismos, que tengan la capacidad de crearse sus propios empleos sin la necesidad de pasar por todos los mismos estereotipos, y que nadie, nadie, les diga lo que tienen que hacer, ¡cuando sean ellos adultos, claro!
Siempre he pensado que trabajar a gusto y crear, es la base del éxito. Tengo la suerte de poder crear y realizar cada día cosas diferentes que te aportan satisfacción. Pero en el camino he vivido situaciones de empresas que te dicen, no te pagamos para que pienses, haz esto.
Pues ojalá el futuro cambie, y todo el mundo piense antes de ponerse a realizar una labor y que se pague a todo empleado por pensar. Esa es la base de la creación y hoy más que nunca necesitamos creadores en nuestras vidas, en la sociedad y en el mundo.
