Gran Hermano sigue haciendo audiencia a golpe de efecto. Dos presentadores acostumbrados a salir en pantalla de forma desinhibida protagonizaron este jueves el momento televisivo del día. Florentino Fernández, invitado a la gala de «Gran Hermano 15», retó a su presentadora a un beso con lengua.
Mercedes Milá, lejos de rechazar el órdago, aceptó la propuesta y, después de varios titubeos sobre la mecánica del ósculo, juntó su boca con la del humorista, lametón incluído. «Me ha metido la lengua hasta el corvejón», decía socarrona después.
La estampa restó protagonismo a la gala que empezó con la expulsión de Alfredo, el concursante gitano que se convirtió en el quinto miembro de la casa rechazado por la audiencia.
