En un Estado de Derecho, cuando sobre alguien recae sentencia condenatoria firme tras un juicio justo y su oportuno recurso sobre un tribunal de ámbito superior, solo puede decirse que la Justicia ha actuado y que hay que acatar las sentencias sin mayores consideraciones. No es el caso de los miembros de Arran que irrumpieron en la iglesia de Sant Miquel de Palma durante la celebración de una eucaristía en febrero de 2014, quienes tras ser condenados a un año de cárcel, sentencia que acaba de ser confirmada por el Tribunal Supremo, acusan a la Justicia de estar en connivencia con la Iglesia y a la Policía de poner en marcha sus mecanismos represivos para buscar un efecto atemorizador. Un delirio.
Lo más grave del asunto es que los concejales de Som Palma y miembros del equipo de gobierno en Cort, Aurora Jhardi y Aligi Molina, además de la directora del Institut Balear de la Dona, Rosa Cursach. Este apoyo explícito a los cinco condenados por un delito contra la libertad religiosa, por parte de políticos que ostentan cargos de responsabilidad y que, de alguna forma, supone respaldar las acusaciones que los condenados lanzan contra la Administración de Justicia, es extraordinariamente grave. Demuestra claramente la irresponsabilidad en que están instalados, apoyando a condenados en sentencia firme por un delito castigado con prisión -aunque ninguno de ellos la cumplirá al beneficiarse de la remisión condicional de la condena-.
Así, se puede afirmar que dos concejales de Palma y una directora general del Govern de les Illes Balears apoyan a cinco delincuentes condenados en sentencia firme por atentar contra la libertad religiosa. En circunstancias normales, serían obligados a abandonar su cargo público, pero lamentablemente no es el caso.
Es más, Aligi Molina incurre en reincidencia cuando él mismo fue condenado por asaltar el despacho del conseller de Educación del Govern en mayo de 2012. Y es que estamos ante un concejal que parece mostrar gran simpatías por todo aquel que vulnera el Código Penal, como hizo él mismo en su día.
