Los amantes de la comida italiana, en especial de la napolitana, están de enhorabuena. Y es que NAP (Neapolitan Authentic Pizza) ha inaugurado un nuevo local en Palma de Mallorca, el primero de la cadena en Baleares. Situado en el número 2 de la céntrica Calle Soler (casi al lado de la esquina con la calle Compte de Barcelona, en Santa Catalina), el restaurante abrió sus puertas a finales del pasado mes de septiembre.
Con restaurantes en Madrid, Barcelona, Bilbao y San Sebastián, la cadena de la auténtica pizza napolitana ha llegado a Palma. Y lo ha hecho en un local que ha reformado totalmente, apostando por el marés y la madera. "Queríamos que tuviera una imagen ligada a Mallorca. Tardamos entre siete y ocho meses en acabar las obras", explica uno de los propietarios, Ludovico Cuomo, a mallorcadiario.com. "Triscaideca Studio llevó a cabo la reforma y la verdad es que no podemos estar más contentos con el espectacular resultado", agrega.
"Hace ya 11 años que Antonio Belardo, el propietario de la cadena, abrió el primer restaurante de la cadena en Barcelona. Poco a poco, nos fuimos expandiendo hasta llegar aquí", agrega. "Su mar, su clima, su riqueza natural, su historia y su ambiente multinacional nos ha cautivado desde el principio y emprendemos este nuevo desafío con mucha fantasía e ilusión. Mallorca respira un ambiente multicultural que la hace única. Es elegida tanto por gente de España como de otros países, en su mayoría británicos, alemanes e italianos, esto la convierte en una ciudad cosmopolita algo que nos encanta y nos representa", apuntan desde NAP.
Una de las grandes especialidades de la casa es la pizza. Como en todos sus establecimientos, el epicentro es el horno de leña fabricado por el artesano napolitano Stefano Ferrara. Cuidar cada detalle en el proceso y respetar sus elaboraciones según el estilo tradicional ruota di carro, les ha hecho merecedores del marchamo de calidad de AVPN (Associazione Verace Pizza Napoletana) en sus pizzas 'Margherita' y 'Marinara', lo cual es como tener el carnet de identidad napolitano.
Ocho son los fundamentos que conforman el ritual de la tradición napolitana de NAP: la masa madre de elaboración propia, las 24 horas de reposo de la masa para su levado y su trabajo manual, el fuego que arde sin pausa, 60 segundos de horneado, 35 centímetros de diámetro en las pizzas, el borde o 'cornicione' aireado de 1 o 2 centímetros y la recomendación de consumir de la pizza nada más que sale del horno. "Nosotros respetamos cada uno de estos pasos para conseguir que nuestras pizzas sean diferentes al resto", explica Cuomo. "Hay muchos padres que vienen a comer o cenar tras las recomendaciones de sus hijos que estudian en Madrid o Barcelona", asegura entre risas.
Señalar que en Palma replican el mismo criterio de elaboración y la misma carta, siendo la mayoría de sus ingredientes de origen italiano. Harinas procedentes de Italia, tomate San Marzano DOP, mozzarella Fior di Latte o el Salame Napoli. La Margherita (AVPN approved) y la Marinara (AVPN approved) conviven junto con otras muy demandadas como la especial NAP, Napoli, Al Filetto, Quattro Formaggi, Diavola, entre otras.
"Defendemos la pizza como una elaboración sencilla, informal, popular y asequible, y al mismo tiempo exquisita y confortable. Es el placer de las cosas sencillas, bien hechas. Hace 11 años tuvimos una idea que surgió de la búsqueda de la autenticidad, del slow life mediterráneo, de poder traer a España un pedazo de Nápoles. Así somos y esta es nuestra historia”, subrayan desde NAP.