Un hombre con antecedentes violentos enloquece en Sóller y protagoniza una serie de altercados -peleas, amenazas a las autoridades, autolesiones, etcétera- en apenas 48 horas.
El primer aviso se produjo cuando varios ciudadanos alertaron de una fuerte discusión entre el individuo y unos trabajadores de instalaciones telefónicas. Según los operarios, el hombre los amenazó de muerte y aseguró que iba a buscar un cuchillo.
A la llegada de los agentes, el presunto agresor ya no se encontraba en el lugar, por lo que se organizó una batida por la zona hasta que fue localizado sentado en la terraza de un bar. Se trataba de una persona reincidente, conocida por su implicación en anteriores actuaciones policiales.
EL MISMO DÍA, INVOLUCRADO EN UNA PELEA
Horas más tarde, se recibió un segundo aviso por una pelea en la vía pública entre las mismas personas. Esta vez, los agentes encontraron al mismo individuo tirado en el suelo con heridas de gravedad. Según las primeras informaciones, había intentado agredir de nuevo a los trabajadores, quienes se defendieron. Fue trasladado en ambulancia a un centro hospitalario y se iniciaron las diligencias para esclarecer los hechos.
Ya de madrugada, el mismo hombre se presentó en las dependencias policiales en un estado de gran alteración. Comenzó a insultar, amenazar de muerte y golpear los vehículos policiales. Durante la intensa intervención, llegó a agredir a un agente, por lo que fue detenido. Dentro del calabozo, continuó lanzando amenazas contra una agente de la Policía Local, llegando incluso a escribir con su propia sangre el número profesional de la misma y autolesionarse, lo que obligó a solicitar la intervención del médico de guardia para administrarle un relajante.
QUEDA EN LIBERTAD Y PROTAGONIZA OTRO ALTERCADO
Tras pasar a disposición judicial, el juez decretó su puesta en libertad. Sin embargo, ese mismo día, por la noche, se produjo una nueva intervención relacionada con el mismo individuo, que aseguraba que alguien con quien había discutido previamente lo esperaba con un cuchillo en un establecimiento comercial.
La persona señalada fue localizada y, durante el registro, se le intervino un cuchillo de cocina, motivo por el que fue denunciada administrativamente. Al reincidente no se le encontró ningún objeto peligroso. A pesar de estos cuatro altercados en 48 horas, el hombre está en libertad.