La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Baleares ha dictado un auto en el que confirma que el presidente del Parlamento de las Islas Baleares, Gabriel Le Senne, diputado del Grupo Parlamentario Vox, será juzgado por un delito de odio, pese a que la Fiscalía no aprecia indicio de delito.
El Tribunal ha desestimado el recurso de apelación interpuesto por Gabriel Le Senne contra el auto del Juzgado de Instrucción número 1 de Palma, que acordó su procesamiento al considerar que los hechos investigados podrían ser constitutivos de un delito de odio y abrió el trámite para que las partes personadas presentaran sus escritos de acusación.
La Audiencia, en su resolución, desestima todos los motivos alegados por la defensa del investigado y expone que las cuestiones relativas a la suficiencia de los indicios sobre la conducta investigada deben resolverse en fase de juicio oral. El Tribunal considera que no es posible, en este momento procesal, archivar la causa, ya que las cuestiones fácticas planteadas por la parte apelante son propias de la vista pública, al existir indicios sobre la posibilidad de que los hechos investigados hayan sucedido del modo en que los relata el juez instructor.
DEBATE JURÍDICO
Según la resolución, “la defensa del investigado no solicita ante este Tribunal, como hemos visto anteriormente, que realice una valoración sobre si los hechos investigados pueden ser considerados, por sí mismos, constitutivos de delito”. Por tanto, el recurso no incide en “la relevancia penal de los hechos investigados, sino en cuestiones relativas a la intencionalidad del investigado o sobre los indicios en los que el juez a quo ha elaborado su relato de hechos punibles, como ya hemos expuesto”.
Es por ello que el Tribunal considera que los argumentos de la parte apelante no guardan relación con la invocación de un supuesto de sobreseimiento libre del artículo 637.2 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, sino con el sobreseimiento provisional regulado en el artículo 641.1 de la misma ley.
La querella se presentó contra el presidente Le Senne tras su actuación durante la sesión del Pleno del 18 de junio de 2024, cuando se debatía la proposición de ley para derogar la Ley de Memoria Histórica de las Islas Baleares, Ley 2/2018, de 13 de abril.
Dos diputadas del Parlamento se negaron a retirar unas fotografías que tenían adheridas a la parte posterior de sus ordenadores portátiles de las denominadas “Rojas del Molinar”, mujeres que en 1937 fueron encarceladas y asesinadas por el régimen franquista por sus ideas políticas o por su militancia en el Partido Comunista. El presidente expulsó a las diputadas y rompió uno de los folios con las imágenes.
3 respuestas
Las cosas como son, no tenia derecho a romper la foto, Y las oponentes a colgar fotos en una mesa presidencial del parlament. Lo ideal si fueran gente seria- lo que cabria esperar-es que los responsables de este parlament expulsaran termporalmente sin sueldo a todos los intervinientes.
Leer » Les grandes cimetières sous la lune».Allí está todo.Georges Bernanos,un católico conservador,pone negro sobre blanco……..» el asco que le producen Franco y sus partidarios».Obispos y arzobispos españoles se opusieron frontalmente a la publicación del libro.Parece ser,que solo la intervención personal del Papá Pio XI,lo permitió.
Es increíble que esto haya llegado a juicio