Sobre las nueve de la mañana de este martes, y sin ningún incidente a reseñar, más de 5.600 alumnos se concentraban en los diferentes puntos de Baleares habilitados para celebrar las pruebas de Selectividad. En Palma, los lugares escogidos han sido el campus de la UIB, el Velódromo y el Palacio de Congresos. Este año, la Selectividad se caracteriza por las extraordinarias medidas de seguridad sanitaria adoptadas.
Un total de 20 sedes y 142 aulas se han habilitado para el inicio este martes de las pruebas de Selectividad, inicio en el que no ha habido que registrar ningún incidente y que se están desarrollando con excepcionales medidas de seguridad sanitaria.
Uno de los centros habilitados para estas pruebas ha sido el Palacio de Congresos, donde los alumnos han sido citados a las 8,30 de la mañana y media hora más tarde empezaban a entrar en las diferentes aulas habilitadas.
Aunque no ha habido incidentes, como anécdota cabe reseñar que la Policía Local ha tenido que instar a los alumnos que salían de los exámenes y hacían corrillos para comentar las pruebas, que no formasen grandes grupos para así evitar posibles contagios.
Algunos alumnos han comentado que este año y como consecuencia de lo atípico de estas pruebas a causa de la pandemia del corpnavirus, han tenido más opciones para elegir en algunas pruebas y también que se ha reducido el temario en algunas asignaturas.
Si algo está caracterizando estas pruebas de Selectividad son las extraordinarias medidas de seguridad sanitaria adoptadas.
En todas las sedes de la PBAU, los exámenes se realizan en las mismas condiciones, con mesa propia y con aire acondicionado. Durante la realización del examen está garantizada la distancia interpersonal.
También el equipo de coordinación y el profesorado se ha ampliado para la edición de este año. En el desarrollo de las pruebas, participan un jefe de expedición para cada punto de examen, como responsable académico, y un coordinador de punto de examen por cuestiones logísticas.
Asimismo y con el objetivo de evitar aglomeraciones, las pruebas de primera hora han congregado alrededor del 40 por ciento de los alumnos y se ha escalonado la entrada del 60 por ciento restante a la segunda hora. También se ha contemplado dar más tiempo de descanso entre cada prueba, para facilitar que las aulas se puedan desinfectar. Mientras se realicen las pruebas, el servicio de limpieza desinfectará los lavabos y los exteriores del aula.
Como norma general, es obligatorio llevar puesta mascarilla higiénica, a ser posible, reutilizable o quirúrgica. En cada aula, hay gel hidroalcohólico en la entrada para que los alumnos puedan limpiarse las manos al entrar y salir de cada examen.
Dentro del aula, se han señalizado las sillas habilitadas para garantizar la distancia entre los alumnos. Los exámenes están sobre la mesa de cada uno de los lugares asignados para evitar los movimientos innecesarios en el aula.
Cuando los alumnos salgan de una prueba no pueden quedarse por los pasillos, sino que deben salir del edificio y llevar puesta la mascarilla cuando no sea posible respetar la distancia mínima de seguridad sanitaria.