Asistimos estos días a una lucha sin precedentes en el seno de los socialistas de Baleares. El ataque de Armengol y Thomàs contra Ramón Socías no sólo no ha disminuido sino que se ha acrecentado tras las declaraciones del nuevo portavoz del PSIB en el Consell de Mallorca, Jaume Garau, asegurando estaba convencido de que el delegado del Gobierno no tenía ninguna gana de “aporrear” a personas del 15-M, incidiendo nuevamente en las críticas sobre la carga policial del lunes. Y lo peor de todo, es que este trío de socialistas, tan pacificistas ellos, tan buenos políticos, tan magníficos gestores, como nos han demostrado sobradamente, no lo hacen porque lo crean así sino porque buscan que Socías no tenga ninguna posibilidad de alzarse con la secretaría general del partido y para conseguirlo todo vale. Es curioso como los socialistas de Baleares en lugar de asumir responsabilidades por lo ocurrido optan por dividir aún más el partido y echar a un lado a los que pueden hacerles sombra.
