Situada entre Valldemosa y Deià, esta finca hoy convertida en museo es la antigua residencia del archiduque Luis Salvador, quien la adquirió en 1870. En su interior puede contemplarse parte de la obra escrita por el aristócrata, así como una colección de muebles y artesanía balear. Desde el exterior, en el que se encuentra un templete de mármol de Carrara, las vistas son espectaculares, especialmente las que permiten contemplar sa Foradada, el accidente geográfico más emblemático de la costa mallorquina, y las puestas del sol más hermosas de toda la Isla.





