Nunca imaginamos que la plaga de la bacteria ‘Xylella Fastidiosa’ obedecería tan estrictamente a su apellido. Pero por lo que se ve, en Balears la plaga supera incluso esta calificación y ya presenta visos de auténtica catástrofe en los cultivos de árboles como el almendro, el olivo y ahora también la higuera, el acebuche y otros frutales. Unió de Pagesos ha lanzado la voz de alarma al advertir de la elevada mortandad de árboles, que califican de “espectacular” en el caso de los almendros. Esta circunstancia, unida al perjuicio económico a los agricultores -tema no menor-, supondrá también una desaparición de buena parte del paisaje agrícola de Mallorca.
Como les ha informado este digital, el investigador del CSIC Juan Antonio Navas, especialista en epidemiología y control de enfermedades de cultivos, propone dada la magnitud de la plaga, la erradicación de todas las plantas huéspedes, incluida la raíz, y el establecimiento de una zona de contingencia de 10 kilómetros, que evite la propagación.
Hasta ahora Balears ha aplicado un protocolo de contención que es dudoso que esté sirviendo para la finalidad que perseguía y sería conveniente que la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca, evaluase la situación y tomase alguna determinación porque parece claro que se está fracasando en cuanto a la contención de la plaga.
