Se denominan
«sex box» y son pequeños aparcamientos destinados a la
práctica de la prostitución en una antigua zona industrial de Sihlquai, en Suiza.
Comenzarán a funcionar el próximo 26 de agosto tras su aprobación en referendum ante las constantes
quejas de los vecinos de la zona de Sihlquai, situada al borde del río Sihl en pleno centro de la ciudad, que no podían soportar más los preservativos y la basura acumulada durante la noche en calles.
Construidos de madera y equipados de un timbre de alarma, se iluminan de noche con luces de colores.
En el recinto podrán trabajar hasta
cuarenta prostitutas que tendrán que ser mayores de edad, tener un permiso de trabajo y estar dadas de alta en la seguridad social.