El Día de la Constitución ha sido la jornada escogida por militantes históricos de Podemos en Baleares para anunciar su desvinculación de Consejo Ciudadano Autonómico, cortando, de esta manera, cualquier vinculación orgánica o funcional con la actual dirección de la formación morada, a la que achacan haber acabado con la democracia interna en el partido, elaborar listas electorales en base a coaliciones de intereses personales, y actuar como una fuerza subalterna del PSOE. Entre los dimisionarios se hallan ex altos cargos morados tan relevantes como la diputada Laura Camargo y el ex presidente del Parlament, Baltasar Picornell.
Militantes históricos de Podemos en Baleares, entre los que se hallan la ex diputada y ex portavoz parlamentaria Laura Camargo, el ex presidente del Parlament, Baltasar Picornell, y el ex concejal de Cort Aligi Molina, han anunciado su dimisión como miembros del Consejo Ciudadano Autonómico de la formación, por su desacuerdo con la "línea errática" que, a su juicio, ha emprendido la actual dirección.
En total, son once ex altos responsables de Podemos los que han formalizado su dimisión, todos ellos pertenecientes a la lista de 'Construint Podem' de la que formaron parte en las elecciones primarias de la II Asamblea Ciudadana del partido celebrada en octubre de 2017.
Entre los dimisionarios figuran también la ex consellera de Serveis Socials Fernanda Caro, que gestionó esta cartera durante la legislatura 1999-2003, coincidiendo con el primer Govern presidido por el socialista Francesc Antich; Adrián Martínez Pacín, Mireia Rubio, Laura Mariani, Sabina Riera, Antonio Sánchez-Tirado, Ximena de la Vega y Helena Herrera.
Los dimisionarios distribuyen sus reproches a la dirección de Podemos en Baleares en cuatro grandes capítulos. En primer lugar, su "política de subalternidad y obediencia al PSOE" que, en su opinión, "ha hecho desaparecer, en la práctica, las reivindicaciones propias de Podemos contra la saturación turística, a favor de la protección del medio ambiente y la regeneración democrática, y la lucha contra la deuda que ahoga a las islas".
En un segundo apartado, estos militantes, algunos de los cuales ocuparon cargos de relevancia en un pasado reciente dentro del ámbito político balear, argumentan que en Podemos "falta democracia interna", y aseguran que la participación de las bases a través de la fórmula de los 'círculos' ha ido desapareciendo progresivamente por el temor de la dirección al debate político y las posiciones críticas. Tanto es así, que los dimisionarios indican que los actuales responsables de Podemos en Baleares "persiguen y rechazan el libre pensamiento y la discrepancia política, confundiendo la lealtad con la obediencia ciega".
En un tercer bloque, los ex miembros del Consejo Ciudadano Autonómico achacan a la organización política su tendencia a la "burocratización" y la "ausencia absoluta de actos públicos en los que se rindan cuentas" de la labor que desarrollan los cargos de Podemos en las responsabilidades públicas que asumen.
Finalmente, censuran las "derivas contrarias al feminismo" y "actidudes agresivas entre compañeros", además de "premiar la obediencia" y "rechazar el talento", siguiendo todo ello los patrones de la "vieja política". En esta misma línea, los dimisionarios denuncian que las listas electorales se elaboran en base a "coaliciones de intereses personales", neutralizando a las personas que resultan "incómodas" a la dirección, y erradicando los mecanismos de comunicación interna.