La Madame del Caso Cursach reconoce que mintió y señala a Penalva y Subirán

El castillo se desmorona. Uno de los pilares del caso Cursach, la testigo protegido 31 conocida como 'La Madame', ha apuntado directamente al juez Manuel Penalva y el ex fiscal anticorrupción, Miguel Ángel Subirán, como artífices de la construcción de todo el relato falso que ha sostenido la causa judicial. Para ello, según la investigada, la habrían obligado a mentir en cuestiones capitales como la agenda del supuesto -e inexistente- burdel o el reconocimiento de policías locales.

Se llama María José L. A. y durante meses fue la clave de bóveda de la instrucción del Caso Cursach. Sus declaraciones ante los entonces investigadores sirvieron para armar acusaciones contra políticos y policías locales.

Ahora, sin embargo, la mujer se desdice del grueso de sus acusaciones y señala al juez Penalva y el ex fiscal Subirán como los cerebros de una instrucción guionizada.

En su declaración como investigada ante el TSJIB la Madame ha reconocido que mintió acerca de la agenda del supuesto burdel de la calle Lluís Martí de Palma al que acudían, según dijo en su momento, los expolíticos del PP, Álvaro Gijón y José María Rodríguez, para disfrutar de orgías a cuenta de Cursach.

La investigada ha asegurado este martes que todo fue una invención y que fue el fiscal Subirán quien lo ideó. Para ello, le facilitó datos de políticos y agentes y la rellenaron juntos. Todo, con la connivencia del juez y los agentes de Blanqueo. Uno de ellos, de hecho, le habría empujado a declarar que Gijón llegaba al burdel "en estado lamentable y que había que servirle droga", entre otros detalles falsos.

Asimismo, ha dado marcha en el reconocimiento de policías locales, que sirvió para incriminar a una importante cantidad de agentes. De nuevo, ha acusado a Penalva y Subirán de aleccionarla y darle indicaciones para que no se saliera del guión. Si erraba en alguna intervención, como ocurrió en un careo, Subirán se enfadaba.

La Madame ha asegurado que tanto juez como fiscal la presionaban y coaccionaban. Concretamente, Subirán le tratababa de inútil y le amenazaba con la cárcel y Penalva le advertía que le podían ayudar en todas sus denuncias y causas con la Justicia "o todo lo contrario".

DECLARACIÓN POR VIDEOCONFERENCIA

La mujer ha declarado todo lo anterior por videoconferencia y en calidad de investigada en una pieza instruida desde el TSJIB. El juez Carlos Gómez investiga los presuntos delitos de prevaricación, revelación de secretos, deslealtad profesional y detención ilegal por parte del juez Penalva y el fiscal Subirán en la macrocausa.

Este martes es el turno del otro testigo protegido 'estrella' del caso Cursach: el 29.