Según ha detallado el Consistorio en un comunicado, este enclave estaba formado por cuatro construcciones de baja calidad hechas con palets de madera y ramas, lo que suponía un "gran" riesgo en materia de seguridad ya que la zona es muy boscosa, hay viviendas cerca y se habían encendido hogueras sin ningún tipo de precaución.
En la intervención se han retirado más de 1.500 kilos de residuos de diversa índole. El personal municipal ha informado a los moradores sobre la posibilidad de recurrir a Servicios Sociales para solicitar alguno de sus servicios.
La intervención policial también ha implicado la apertura de un expediente por un presunto delito contra la salud pública ya que en el asentamiento había cinco plantas de marihuana.