El PSOE ha protagonizado este fin de semana un mitin en el polideportivo Germans Escalas, en Son Gotleu, donde ha aparecido Alfonso Guerra, que aunque a muchos les pueda sorprender sigue en política. A Guerra no se le ha ocurrido otra cosa que decir que las reuniones del PP podrían celebrarse en la cárcel, una bromita que ya hizo en Palma hace unas semanas un tal Gorrías. Se ve que entre ellos se prestan bromas para la campaña. Seguramente Guerra no pensó lo que dijo. Precisamente, con un hermano condenado por tráfico de influencias y que le obligó a dimitir como vicepresidente del Gobierno, pero increíblemente sigue siendo diputado en el Congreso de los Diputados. Guerra, compañero de Barrionuevo y Vera, dos altos cargos que ingresaron en prisión por asesinatos de Estado. Si estas bromitas son las que puede aportar el PSOE con la actual situación, mal vamos. De hecho, el polideportivo de Son Gotleu, feudo socialista, ni se llenó para asistir al mitin de Guerra y Antich.





