La sentencia de este pleito civil llega tres años después de la condena por la vía penal que recibió al reconocer un delito económico. Entonces se le condenó a un año de cárcel pero el Tribunal no dirimió sobre la responsabilidad civil ya que, como recuerda el diario, los perjudicados anunciaron que reclamarían los perjuicios sufridos-dos millones de euros- en un procedimiento civil.
Éstos, tal y como recogió la sentencia del tribunal penal, se generaron cuano Pizá y Dalmau crearon la sociedad Consaba y con ella, se adjudicaron a espaldas del resto de accionistas determinados servicios médicos como la diálisis, la hemodiálisis, el TAC o la densiometría. Así, todo eran beneficios para ambos ya que los gastos corrían a cargo de la propiedad pero los beneficios solo los recogían éstos, a través de la sociedad Consaba.
Además, para camuflar los datos económicos -tanto a sus socios como a Hacienda- los responsables de la entidad médica crearon una doble contabilidad.
Pizà ha llevado hasta la última instancia judicial la cuestión y ahora el Alto Tribunal de Balears da la razón a sus antiguos socios, entre ellos Pau Ramis, poniendo punta final a este litigio que ha durado diez años.