El PP tiene en sus manos el poder absoluto, tanto en el Gobierno de la nación, como en la gran mayoría de las comunidades autónomas, por lo que, a partir de ahora, el futuro depende única y exclusivamente de su gestión. Ésta es la hora de la verdad, la de gobernar para sacarnos de esta situación dramática en la que estamos metidos y de la que han asegurado que nos pueden sacar. Los españoles han depositado en manos de Rajoy y su equipo todo el poder necesario para poder gobernar sin someterse a los chantajes de los nacionalistas, tal y como ha sucedido hasta ahora, por lo que con sus 186 diputados sólo tiene que dar cuentas al pueblo español que le ha permitido gobernar en solitario y hacer lo que tenga que hacer para devolvernos la esperanza y sacarnos del pozo. Sólo espero que no se cumpla aquella vieja máxima de que “el poder corrompe y el poder absoluto corrompe absolutamente”, porque no está el país para corrupciones, ni Rajoy tiene el poder para otra cosa que no sea sacar a este país adelante.





