La maquinaria ya está engrasada y a pleno funcionamiento. El único objetivo es apartar a José Ramón Bauzá de la presidencia del PP Balear. Y cuanto antes. Con esa hoja de ruta y único punto, el sector crítico de los populares han iniciado reuniones serias más allá de encuentros para valorar cual es su fuerza.
Conscientes de la que tienen, este mismo martes han llevado a cabo una reunión con la presencia de algunos “barones” del partido como los aún consellers en funciones Martí Sansaloni y Biel Company o pesos pesados como Pere Rotger, Joan Simonet o el exalcalde de Palma Mateu Isern, recién llegado de su viaje por la costa francesa.
En esta reunión se ha decidido convocar un nuevo encuentro para el próximo jueves en el restaurante Binicomprat, para elaborar ya de manera definitiva la estrategia a seguir para forzar a Bauzá a que dimita. Un encuentro en el que están invitados, además del núcleo duro de los críticos, todos los cargos electos del partido.
Se contemplan varias opciones de cómo conseguirlo, pero no hay ninguna fisura en cuanto al objetivo. La idea es llegar a la próxima reunión de la Junta Directiva del partido, con la estrategia a seguir bien marcada, y si es posible, con el pacto ya fraguado entre este sector crítico y Bauzá.
La votación de la Junta para permitir a Bauzá irse a Madrid como senador, está también en el tablero de juego y seguramente será una de las bazas importantes del sector crítico. Están dispuestos a votar en contra de la salida de Bauzá, si este no dimite antes de su cargo de presidente del PP balear. Si esto se produce, darían su visto bueno a la marcha, y se emprendería la mejor salida para el partido hasta la celebración de un congreso, que como ha dictaminado Madrid, no será hasta el año que viene en ningún caso.
La creación de una gestora es una de las posibilidades, pero desde el sector crítico, recuerdan que los estatutos ofrecen otras posibilidades. En la misma Junta se podría votar un presidente nuevo que mantuviera el cargo de forma provisional hasta la celebración del cónclave popular que sí sentaría las bases del mando del partido.