Esta decisión del Pacte fue duramente criticada por el PP pues entendía que convertía a la EFM en una “sociedad presidencialista, sin transparencia y sin participación” al tiempo que representaba “un ataque a los derechos de los trabajadores”. Por todo ello, solicitó al equipo de Gobierno que diera marcha atrás y revocara los poderes de Jordi Vilà, también de Podemos.
El PP denunció que dicha medida “permitía despedir trabajadores de forma unilateral y sin consultar a nadie, ni dentro de la propia empresa ni con la oposición”.
Montserrat Oliveras ha asegurado que “en el PP tenemos un firme compromiso con la transparencia y con los derechos de los empleados públicos. Por esa razón, desde la oposición seguiremos fiscalizando la labor del señor Hila y sus socios de gobierno con rigor y responsabilidad”.
En este sentido, ha adelantado que “en el Pleno de este jueves exigiremos que, por coherencia, esta propuesta de revocación se extienda también a los gerentes de las demás empresas y sociedades municipales”.
La concejal popular ha concluido asegurando que “después de 4 años de inactividad de la izquierda, lo que los ciudadanos esperan es que el ayuntamiento del señor Hila se decida a dar soluciones a los problemas de Palma y lo haga pensando en el bienestar colectivo y no solo en tener contentos a sus socios de gobierno”.