Mateo Isern promete: ha hecho un equipo interno conservando personas de nivel; les ha dado cancha, tiene madera de gestor, va operando y puede convertirse en la sorpresa. No es un político al uso, no tiene sus ticks; le da igual lo que digan, tiene un plan y avanza. Isern ha llegado y encargó la foto económica, que se dijera lo que había y que no se volviera a hablar de ello. Ahora ya buscó el dinero para pagar a los proveedores y, mientras otros siguen dando vueltas y vueltas, en Cort lo peor empieza a pasar. Si ahora paga a los dos mil proveedores, como parece, va a dejar al Govern en una situación lamentable, si bien hay que reconocer que los problemas de Bauzá son mucho mayores. Pero recordemos, para explicar la bisoñez de Aguiló y Bauzá, que tuvieron la idea de poner en la Ley del Emprendedor que pagarían a 30 días, cuando son incapaces de hacerlo a seis meses. Ustedes verán: Baleares necesita gestores, no políticos que nos mareen. Y en esto, en Cort empieza a verse madera.





