La primera reacción al cierre de la crisis vivida en el seno de Vox Baleares ha venido del presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, quien ha señalado en declaraciones a los medios que "por lo menos volvemos a trabajar con normalidad". Asegura, eso sí, que ha sido "un espectáculo que no ha gustado a nadie" y que la solución ha sido posible en buena medida por el informe de los letrados del Parlament que frustró la intentona de los cinco diputados díscolos. Posteriormente, Idoia Ribas ha emitido un comunicado en el que ha considerado que este "punto de inflexión" es una oportunidad para dar "estabilidad" al Govern balear.
Para Le Senne, lo sucedido ha sido "una contoversia grande dentro del grupo, como pasa en todos los partidos y empresas, pero que en esta ocasión ha sido tan grande que ha salido a la luz pública de este modo un tanto aparatoso, pero que se ha solucionado y esperemos que no tenga más consecuencias". "Me alegro de que al final no haya llegado la sangre al río", ha señalado.
"Espero que ahora vayamos hablando y podamos solucionar cualquier controversia que quede", ha señalado Le Senne, que subraya que por su parte "no quedan heridas". Por ello, espera que ahora los siete diputados con que cuenta Vox en este momento "podamos trabajar con profesionalidad, seriedad y rigor", aunque "haciendo cambios en el método de trabajo para que todo el mundo esté lo más a gusto posible"
El presidente del Parlament ha pedido además disculpas a los ciudadanos por el "espectáculo" que han dado, para cuya solución "creo que ha sido importante el informe de los letrados, que ha permitido este impasse y salir de la situación". Ese documento, a su juicio, "confirma que la decisión de no cesar inmediatamente fue acertada, en contra de lo que alguno opinaba".
Ahora toca reconstruir el partido en Baleares, para lo cual Le Senne ha asegurado que no le consta que vaya a haber ningún cambio en la composición del grupo parlamentario, a cuyo frente se encuentra una de las diputadas díscolas, Idoia Ribas. "No me consta nada. Me remito al comunicado", ha apuntado, para agregar que "no me voy a pronunciar, ahora tenemos que ir hablando y haciendo las mejoras oportundas, pero no necesariamente en esa dirección", con lo que ha descartado también cambios en la estructura balear del partido.
Asimismo, Gabriel Le Senne mantiene la conveniencia de reformar el reglamento de la Cámara, aunque "dependerá de la posición del partido". "A lo mejor la reforma del reglamento que se hizo en la anterior legislatura, con ocasión de la crisis de Podemos, se resolvió mirando demasiado ese caso en particular y el resultado no ha sido perfecto, pero es algo para estudiarlo con tranquilidad", ha agregado.
Finalmente, el presidente del Parlament ha subrayado que su relación con Madrid "es buenísima, y también con el comité provincial, pero también con los cinco compañeros del grupo, y así intentaré seguir, con buena relación personal con todo el mundo igual que con el resto de portavoces de los grupos".
PARA IDOIA RIBAS, UN PUNTO DE INFLEXIÓN
Por su parte, Idoia Ribas ha considerado que la reconciliación del grupo parlamentario con la dirección del partido supone un "punto de inflexión" que contribuirá a dar "estabilidad" al Govern balear.
Ribas ha señalado que esta nueva etapa para el grupo político "permitirá avanzar en los compromisos con la ciudadanía y en el acuerdo de gobierno con el PP". Así, ha señalado que "estamos convencidos de que esta oportunidad supondrá dar estabilidad al Govern y posibilitará avances en los compromisos programáticos reflejados en los 110 puntos del acuerdo de gobernabilidad".
Asimismo, la portavoz de Vox ha subrayado que "la libertad lingüística seguirá siendo bandera de nuestra acción de gobierno, pero no la única".
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