Agentes de la Policía Nacional han detenido a un matrimonio de ciudadanos alemanes, acusados de sustraer a sus dos hijos menores de 3 y 7 años, de una institución pública alemana que tenía la custodia de ambos.
El riesgo, según las autoridades germanas, era la de un posible suicidio colectivo. De ahí, la rápida actuación de las autoridades mallorquinas, salvaguardando la integridad de los niños antes de proceder a la detención.
Los padres habían huído del país y se habían refugiado de la isla, facilitando un domicilio ficticio para no ser descubiertos. El padre, de hecho, trabajaba en Palma.








