No sé si queda claro con el título de este artículo, pero soy un enamorado de Ciutadella. Hace muchos años que su enigmática presencia me cautiva y me atrapa. El silencio y la paz de sus calles me cobijan.
Pero una vez al año ya saben, no hace daño, el silencio que tanto amo, se convierte en algarabía, fiesta... Es... Sant Joan. Llevo 15 años fiel a mi cita, por supuesto siempre que puedo que puedo, pero hago lo posible por no dejarlo pasar. Es mi momento kit-kat, es el momento de divertirme... En el transcurso de estos años, he observado que la fiesta se mantiene fiel a su tradición de siglos, pero que las personas que acuden han cambiado.Los de mi quinta, antes unos jovenzuelos cuando fuimos por primera vez, hemos sido desplazados por unos niños. Sí, lo que leen, niños que confunden una tradicional fiesta maravillosa, con salir por Es Pla, hacer botellón y emborracharse.
No entiendo la juventud de hoy en día, que confunde cualquier verbena o fiesta, en pasar de las tradiciones y coger un “pedal” descomunal, con las consecuencias que tiene eso: ensuciar, denigrar un acontecimiento de siglos, hasta el punto de prostituir la fiesta.
Este año, por culpa de unos energúmenos ha habido un accidente muy grave en Els Jocs d'es Pla, una supuesta violación y una reyerta, todo ocurrió de noche, cuando más “fauna” hay. Estas sombras, hacen que una fiesta que siento muy mía, se transforme y se llene de tintes equivocados; todo provocado por especímenes que lo que tendrían que hacer es quedarse en casa y no amargar al resto que quiere pasarlo bien cívicamente.
Ya ni quiero hablar de esos viajes estudiantiles, con menores de edad que viajan solos y en grupo, sin vigilancia de alguien mayor,personajes que solo van a la fiesta a beber y beber y no estoy recordando el villancico.
Por eso me gustaría invitar a que la gente reflexione un poco, que ponga freno a los jóvenes, y sobretodo, que se ponga freno a esas personas que no saben divertirse, que no saben que es posible pasarlo bien sin convertirse en un gallo de pelea.
Para terminar, decir que divertirse es sólo eso, diversión, reir, disfrutar, pasarlo bien con los amigos, en un ambiente que solo se vive en Menorca. A pesar de todo lo ocurrido desde aquí: ¡¡Visca Ciutadella, visca Sant Joan!!
Tommy Ferragut
RRPP Mallorca





