Un accidente múltiple que tuvo lugar el pasado viernes en Son Ferriol ha vuelto a activar el debate sobre el uso del móvil al volante. El siniestro tuvo lugar alrededor de las 11:30 horas, cuando un minibús de transporte de menores se desvió al carril contrario y chocó contra varios coches que se encontraban correctamente aparcados.
DISTRAÍDO CON EL MÓVIL
Según ha informado la Unidad de Vehículos de Accidentes (UVAC) de la Policía Local de Palma, el conductor del minibús admitió que el incidente se produjo al desviar la mirada hacia su teléfono móvil tras recibir una llamada. Esta breve distracción fue suficiente para que el vehículo invadiera el carril contrario y terminara provocando un choque en cadena que afectó a cuatro vehículos.

DOS MENORES, HERIDOS LEVES
En el momento del accidente, el minibús transportaba a siete menores y un adulto. A consecuencia del impacto, dos de los menores resultaron heridos, aunque sus lesiones fueron de carácter leve. Cuando las autoridades llegaron al lugar, los pasajeros ya habían abandonado el vehículo.
Las pruebas de alcoholemia realizadas al conductor resultaron negativas. Sin embargo, fue denunciado por utilizar un dispositivo de telefonía móvil mientras conducía, una infracción grave que conlleva una multa de 200 euros y la retirada de seis puntos del carné de conducir.
Afortunadamente, el accidente no ha causado daños personales de mayor gravedad, pero sí importantes desperfectos materiales tanto en el minibús como en los coches estacionados.
Desde la Policía Local se ha hecho un llamamiento a la responsabilidad, recordando que una mínima distracción puede tener consecuencias graves en la carretera.







