Rafel Nadal ha ganado su undécimo Roland Garros haciendo lo que mejor se le da: jugar a tenis. Sin embargo, a nadie se le escapa que el número uno del mundo, y deportista más laureado de nuestra isla también ejerce -junto con su familia- de empresario y, en grandes dosis, de lo que ahora se llama influencer. De hecho, gracias a esta última faceta ha conseguido muchos contratos publicitarios y una posición privilegiada a la hora de llevar a cabo el proyecto del Rafa Nadal Sports Centre y la Rafa Nadal Academy.
El manacorí ya es lo suficiente mayor como para saber las consecuencias de todos sus actos en la era de las redes sociales. Antes, si lo que uno hacía o decía no gustaba se quedaba en una “estirada de pell” en la tertulia del bar. Ahora, los mismos resortes que se utilizan para informar de las declaraciones de Nadal, también sirven para dar altavoz a aquellos -famosos o anónimos- que no están de acuerdo con su “pensamiento, obra, palabra u omisión”.
Y así es como a Nadal le realizan preguntas y él, como todo hijo de vecino que tiene una opinión, se presta en responderlas. Y ha de ser consciente que sus respuestas no gustarán a todo el mundo, con lo que habrá abierto la veda a las críticas más feroces por parte de detractores. Es más, también se expone -aunque pueda que no le importe- a que personas que sentían simpatías por él dejen de sentirlas por no compartir el sentir de sus declaraciones.
Durante los últimos días, y a raíz de las declaraciones de Nadal respecto a su opinión favorable a la convocatoria de unas elecciones legislativas en España, se han escuchado comentarios de todo tipo. Y claro está en que Nadal no es el primer deportista conocido y reconocido que muestra una posición política. Josep Guardiola y Gerard Piqué son ejemplos de ello. Sin embargo, y al igual que les ha sucedido a los nombrados, Nadal no está exento de que los demás muestren de diversas maneras su fuerte disconformidad con lo dicho.
Así pues, la total libertad de uno tiene como contrapeso la total libertad de los demás.
Enhorabuena Rafa por los grandes días de gloria deportiva que nos das.





