OPINIÓN |MUJERES

La verás, pero no la catarás

Ahora dicen que la cercanía de una mujer de bandera es perjudicial para la salud. Dicen que mirar, sin querer, naturalmente, a una señora estupenda, dispara los niveles circadianos por culpa del cortisol. Extraña hormona esta que transforma el deseo en diabetes o hipertensión. Hombre, este tipo de señora estupenda ha sido hasta ahora una fuente de estímulo, mucho más en primavera, pero ahora resulta que es material peligroso. A saber qué elementos de radiación transmite los que llaman con cierto tono goloso una “tía buena” para que los investigadores la consideren fuente de males para la salud del mirón. Pero como no se pueden retirar de la circulación, como nadie puede prohibirles que se contoneen delante de ti en un paso de peatones o que crucen las piernas en la terraza de la cafetería, pues quizá convenga evitar esas miradas furtivas, esos disimulos ridículos para volver la cabeza, esos gestos de deseo, esos pensamientos de frustración. Más te vale conformarte por aquello de “la verás pero no la catarás” o quitarte tensión con aquello de que las uvas están verdes. Cualquier cosa antes de que te provoque estrés por no poder conseguir al vuelo lo que pasa cerca de ti. Bueno, mucha investigación sobre el cortisol, pero ninguna sobre cómo se puede evitar ese gesto espontáneo, visceral, instintivo, de mirar el todo o parte de una señora estupenda. Y que digan si merece la pena reprimirlo porque el cortisol puede disparar los niveles circadianos.

Suscríbase aquí gratis a nuestro boletín diario. Síganos en X, Facebook, Instagram y TikTok.
Toda la actualidad de Mallorca en mallorcadiario.com.

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Más Noticias