Reclamaciones prescritas

No son pocos quienes, en uno u otro momento, reciben en su casa una atenta carta de un despacho de abogados que les emplaza “a ponerse en contacto con ellos a la mayor brevedad por tratarse de un asunto de su interés y a fin de evitar un procedimiento judicial”, facilitando un teléfono de contacto al que debes llamar. Habitualmente, las anteriores cartas se deben a pequeñas deudas con empresas de telefonía o distintos suministros, de las que muchas veces ni te acuerdas. Dada la frecuencia de las anteriores misivas, quiero explicar qué opciones asisten a sus destinatarios.

En primer lugar, muchas veces las cartas te emplazan a llamarles para “evitar las costas y gastos de la vía judicial”. Ante esto, debo decir una cuestión que resulta aplicable con carácter general: en aquellas reclamaciones inferiores a 2.000 euros (el 99% de esta clase de asuntos) no se imponen a los demandados (en el caso de que pierdan el juicio) las costas de abogado ni de procurador, puesto que la intervención de ambos profesionales no es preceptiva en un asunto de esa cuantía. Por lo tanto, que ese concepto no os desanime a luchar por vuestros derechos.

Lo segundo, y no menos importante: exigid toda la documentación que teóricamente de soporte a la deuda. Revisad que se trate de un gasto imputable a vosotros, en una línea telefónica que estuviera a vuestro nombre, etc…

Tercero: Fundamental revisar la fecha de expedición de la factura. ¿El motivo? Las deudas por suministros (como el teléfono) prescriben por el transcurso de 5 años. La prescripción quiere decir que esa acción no puede ejercitarse, es decir, que la deuda no es exigible. Ojo: la prescripción puede interrumpirse. ¿Qué quiere decir? Si en algún momento se han dirigido extrajudicialmente a vosotros, ese plazo vuelve a comenzar. Sin embargo, si no lo han hecho, ya sabéis: si se os demanda, alegad que la deuda ha prescrito.

Cuarto: Un consejo. No tratéis las anteriores cuestiones por teléfono, sino por escrito. Que quede constancia de vuestra intención de reclamar vuestros derechos y de evitar un pleito (siempre, claro está, que la parte que reclame os facilite la documentación que pedís)

En todo caso, os recomiendo que si os sucede algo así, os asesoréis. Buenos consejos nunca sobran.

¡Feliz verano!

 

Suscríbase aquí gratis a nuestro boletín diario. Síganos en X, Facebook, Instagram y TikTok.
Toda la actualidad de Mallorca en mallorcadiario.com.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Más Noticias