Lo peor ya ha pasado y de hecho, la alerta se ha desactivado para Balears pero la inestabilidad meteorológica seguirá presente en las islas durante este fin de semana.
El Aeropuerto de Palma se ha visto obligado a espaciar más los aterrizajes a la capital balear porque la gota fría o DANA (depresión aislada en niveles altos) que azota el Mediterráneo genera condicionas adversas en el archipiélago.
Viernes complicado en las carreteras del norte de la isla. Algunas de ellas han tenido que ser cerradas al tráfico por importantes inundaciones, aunque horas después han vuelto a la normalidad.
Llega la gota fría y con ella, lluvias torrenciales y avalancha de rayos. Este lunes, se han registrado más de 18.000, según la Agencia Estatal de Meteorología. La mayoría de ellos, sobre el mar balear. Para este martes se esperan cielos nubosos acompañados de chubascos en Baleares.
La gota fría que desde este sábado afecta a amplias zonas la península se irá desplazando lentamente hacia el este, sureste peninsular y las Islas Baleares a lo largo de estos días, propiciando a su paso chubascos e intensas tormentas, granizo y fuertes rachas de viento.
La llegada desde el Atlántico de una DANA (Depresión Aislada de Niveles Altos) o gota fría a la península, junto a la presencia de aire cálido y húmedo del Mediterráneo, propiciará un fin de semana muy inestable en amplias zonas del país e intensas lluvias en áreas del este y
